Se levanta muy temprano y lo primero que hace es patear el balón de fútbol que está en el patio de su casa. Esa no sería ninguna novedad para la gran mayoría de los niños en el mundo, pero no para Gabriel Muniz, un brasileño de 11 años, que nació sin pies y en base a esfuerzo y superación ha logrado jugar el fútbol…
El caso ha sido destacado por la prensa mundial, puesto que Gabriel presenta esta condición desde su nacimiento, cuando le diagnosticaron una malformación congénita por la cual no había desarrollado sus pies.
El joven futbolista viaja a la escuela en bicicleta y también hace natación y entrena en la escuela del Barça en Saquarema, Brasil. “Con sacrificio y voluntad, es uno de los mejores jugadores de su equipo y el capitán de su clase de gimnasia. Por lo general juega descalzo dado que sólo debe utilizar prótesis en los días de lluvia para no resbalarse. Corre, gambetea y hace pases como cualquier otro niño de su edad, pero demostrando una pasión inconfundible y una constante voluntad de superación. Es por todo esto que su historia recorrió el mundo y en 2012 pudo cumplir su deseo de viajar a España, conocer el Barcelona Fútbol Club (FCB) y jugar con algunas de sus estrellas favoritas como Lionel Messi”, describió el canal Discovey.
“Si bien su condición lo imposibilita para en un futuro jugar en una liga profesional, tiene esperanzas de desarrollar su carrera de la mano de los deportes paralímpicos”, agrega el medio.
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